Novela, artículo, autor, historia. Soldados de Salamina además de ser una novela en toda regla es como el mismo personaje insiste en varias ocasiones; un artículo periodístico de investigación.
La novela que se divide en tres partes viaja de un presente 1994 (primera parte) a un pasado 1939 (segunda parte) y de vuelta al 2002 cuando concluye el final de la novela y su tercera parte. Fechas aproximadas que nos sitúan en un tiempo determinado y un contexto específico.
Por un lado vemos a Javier Cercas, el autor de la novela, que se vuelve el personaje principal, el que se interesa por un soldado, un revolucionario, un escritor. Sánchez Mazas, que no fue fusilado junto con un grupo de presos falangistas y, no fue fusilado porque un soldado no quiso matarlo. Si no conociéramos la historia de España y no tuviéramos ningún vínculo político hacía nada. Esta obra sería todavía más universal de lo que ella misma pretende. Sánchez Mazas hombre fundador e ideólogo de la Falange se nos presenta como una persona que vive y genera una etapa gris, de guerra, de confusión que experimenta en sus propias carnes.
Javier Cercas se acerca a la vida de Sánchez Mazas en un momento muy concreto de su historia. Como una lupa que analiza los hechos que le rodean a su alrededor. Y se queda casi ciego sin sus gafas trascendiendo su historia para llegar a la suya propia y a la de otro personaje clave.
Tras estos detalles en un último momento de inflexión, antes de terminar su obra o su investigación nos define y se pregunta en el capítulo final qué es un héroe, quiénes ganan la guerra, quiénes cargan a solas con todo el desenlace de la historia e incluso de los hombres, mujeres y familias.
Miralles será la clave y la pieza final, en su residencia Javier Cercas con Conchi, con sus nuevos amigos con su anhelo de ser padre. Culmina una historia entrañable con cierto desazón de vidas que deambulan hasta un pueblo fantasma.
Por un lado vemos a Javier Cercas, el autor de la novela, que se vuelve el personaje principal, el que se interesa por un soldado, un revolucionario, un escritor. Sánchez Mazas, que no fue fusilado junto con un grupo de presos falangistas y, no fue fusilado porque un soldado no quiso matarlo. Si no conociéramos la historia de España y no tuviéramos ningún vínculo político hacía nada. Esta obra sería todavía más universal de lo que ella misma pretende. Sánchez Mazas hombre fundador e ideólogo de la Falange se nos presenta como una persona que vive y genera una etapa gris, de guerra, de confusión que experimenta en sus propias carnes.
Javier Cercas se acerca a la vida de Sánchez Mazas en un momento muy concreto de su historia. Como una lupa que analiza los hechos que le rodean a su alrededor. Y se queda casi ciego sin sus gafas trascendiendo su historia para llegar a la suya propia y a la de otro personaje clave.
Tras estos detalles en un último momento de inflexión, antes de terminar su obra o su investigación nos define y se pregunta en el capítulo final qué es un héroe, quiénes ganan la guerra, quiénes cargan a solas con todo el desenlace de la historia e incluso de los hombres, mujeres y familias.
Miralles será la clave y la pieza final, en su residencia Javier Cercas con Conchi, con sus nuevos amigos con su anhelo de ser padre. Culmina una historia entrañable con cierto desazón de vidas que deambulan hasta un pueblo fantasma.